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Laboral
El mercado laboral está incurso en un profundo cambio de paradigma en el que el trabajo en sí se enfrenta a una constante pérdida de valor al ser desplazado por una acuciante necesidad de talento. A pesar de que los niveles generales de desempleo siguen en tasas elevadas, se observa un creciente número de vacantes que no pueden ser cubiertas.
El éxito empresarial está muy vinculado a la habilidad para gestionar el capital humano de la organización.
El marco regulatorio
Las relaciones entre la empresa y sus empleados están fuertemente reguladas. El código que rige estos vínculos es el Estatuto de los Trabajadores y su denominación no es casual, pues se inspira el la protección del trabajador como parte más débil y el empleo como bien mayormente protegible.
En muchas ocasiones, los convenios colectivos contienen obligaciones de complejo encaje en la realidad de nuestra actividad y otras de difícil interpretación.
El talento
La empresa se enfrenta a un mercado en el que es complicado defender márgenes. La globalización, la libertad de establecimiento y el avance tecnológico amenazan recurrentemente la rentabilidad empresarial y su mantenimiento en el tiempo.
Para poder subsistir, el empresario debe de acudir a inversiones, innovación, desarrollo de nuevos productos y habilidades, ... escenarios en los que se complica sostener conceptos como la mera presencialidad, retribución por antigüedad, licencias retribuidas y, en general, aquellos costes que no tienen un vínculo directo rendimiento.
No queda otro camino que contar con recursos humanos más capaces, mejor formados y en condiciones de evolucionar constantemente. En el reverso de la moneda, el empresario debe de ser raudo y eficaz en la toma de decisiones sobre situaciones que nada aportan a la empresa y cuyo mantenimiento prolongado acaba por enquistarse y extender ampliamente sus efectos desfavorables.
Los conflictos
En 2021 y a nivel nacional, los servicios de mediación, arbitraje y conciliación conocieron de 332.424 conciliaciones individuales de las que 120.900 (un 36,37%) concluyeron con avenencia. Por razón de la materia
- 192.410 correspondieron a despidos,
- 104.277 a reclamaciones de cantidad
- y otras 35.737 por sanciones y otras causas.
Las reclamaciones tuvieron un importe total de 2.199,93 millones de euros de los que 2.145,42 correspondieron a despidos.
De todas ellas, correspondieron a Galicia un 5,87% del total, porcentaje similar al que correspondería por su nivel de ocupados; sólo un 26,89% concluyeron con avenencia, muy por debajo de los acuerdos a nivel estatal.
La inspección de trabajo
En 2020 la inspección de trabajo desarrolló 555.065 actuaciones, de las que 33.854 correspondieron a Galicia, proponiendo sanciones por 244 millones de euros.
Las actuaciones sobre prestaciones por desempleo son, con diferencia las más numerosas (106.385), seguidas por las modalidades de contratación.
